Tras el terremoto que asoló Nepal en abril de 2015, la FUNDACIÓN ALMAYUDA ayudó a la ONG italiana Asia Onlus a construir refugios para los habitantes de Saranthali y Yarsa, dos pueblos del Distrito de Rasuwa.
El 25 de abril de 2015, un fuerte terremoto asoló Nepal. Murieron miles de personas y numerosos edificios e infraestructuras quedaron destruidos. Fue un duro golpe para ese pequeño país que, gracias al turismo, la agricultura y la ayuda internacional, empezaba a recuperarse de la guerra civil sufrida entre 1996 y 2006.
Incluso en casos de urgencia absoluta hay que establecer prioridades.
Ante la emergencia, la ONG Asia Onlus, que está presente en Nepal desde 1996, decidió intervenir en el Distrito de Rasuwa, en el centro del país, a 210 kilómetros y siete horas por carretera de Katmandú. Se trata de un distrito muy conocido por su inaccesibilidad.
Una evaluación rápida reveló que los habitantes de dos pueblos, Yarsa y Saranthali, estaban en una situación crítica. Los caminos se habían hundido; las provisiones, las semillas y los efectos personales de las familias estaban enterrados bajo los escombros de sus casas. La urgencia absoluta era dar cobijo a las familias en refugios resistentes a los siguientes monzones.
Construir y sembrar
Yarsa y Saranthali cuentan con más de 2.600 habitantes y casi todos ellos necesitaban con urgencia un refugio seguro que les permitiesen dedicarse plenamente a la plantación del arroz, ya que el monzón es destructivo, pero sus lluvias fertilizan el suelo.
Se decidió intervenir en Saranthali en un primer momento y a continuación actuar en Yarsa. Incluso en casos de urgencia absoluta hay que establecer prioridades.
Las 821 familias de Saranthali recibieron un kit de refugio compuesto por láminas de hierro ondulado, alambre de hierro y clavos para construir los techos de los refugios. Para los pilares y las paredes se emplearon los materiales disponibles en la zona: piedra, bambú, madera, etc. Todos los productos destinados a la construcción y al equipamiento de cocina de cada familia se compraron en Nepal mediante una licitación con objeto de reactivar la economía local. Asia Onlus contrató a un ingeniero para que aportase a la misión su asistencia permanente en la construcción de refugios resistentes a las lluvias del monzón.
Dado que era imprescindible construir refugios seguros y plantar el arroz cuanto antes, no había personas disponibles para demoler las construcciones dañadas por el seísmo. La seguridad de la población se garantizó mediante la delimitación y la señalización minuciosa de todas las zonas peligrosas. Se definieron zonas para los niños y se acondicionaron vías seguras para el transporte y para el paso de personas y animales.
¡En tres meses, misión cumplida! Fue una carrera contra reloj en la que la FUNDACIÓN ALMYUDA patrocinó a los profesionales que componen Asia Onlus.
Fotos DR
Enlace de intéres : www.asia-ngo.org